AEGC tenía razón cuando denunció que la modificación de la jornada laboral en el Servicio Marítimo era abusiva. Este fin de semana la Directora General a través de un IMBOX comunicó la modificación a los Jefes de Comandancia.
Madrid 23 de mayo de 2023
Después de meses denunciando el atraco que la DGGC quería hacer con la modificación de su jornada laboral a los agentes destinados en el Servicio Marítimo, AEGC tiene confirmación oficial de que la nueva responsable de la Guardia Civil ha tomado la sabia decisión de recular en la medida que había tomado su antecesora y volver a la jornada laboral recogida en la Orden de 2014. Es decir, que los servicios de 24 horas contaran como lo que son SERVICIOS DE 24 HORAS y no como pretendió María Gámez que los fijó como si como si solo se prestaran 15 horas.
Una modificación que para AEGC era una pérdida de derechos y un robo a los agentes destinados en el Servicio Marítimo, desde su Jefatura de su propio servicio, a los que sólo se les abonaban 15 horas y no las 24 que tenían que permanecer en la mar.
AEGC lamenta que los guardias civiles del Servicio Marítimo hayan tenido que esperar a que se produjera un cambio en la Dirección General para ver retornados sus derechos. Jamás entendimos como se pudo firmar esta Orden que contaba con la oposición de todas las Asociaciones Profesionales en el Consejo de la Guardia Civil y que claramente trataba a los agentes como mano de obra barata, o si se prefiere, como si se trataran de ESCLAVOS.
En AEGC esperamos que esta nueva Orden se cumpla con la misma prontitud con la que se cumplió la que tanta controversia creó y que se vigile que todos los responsables acaten el cambio, porque nuestra Asociación ya tiene conocimiento de que en algunos destinos están dispuestos a no aplicar el próximo mes de junio el cambio.
Además desde AEGC esperamos que la metedura de pata de la antigua dirección sirva a la nueva Directora General para tomar en consideración los criterios que tienen las Asociaciones Profesionales, criterios objetivos que son, en definitiva, los que tienen los guardias civiles que están al pie de la calle sorteando los problemas diarios del servicio que prestan.